Encendí la luz
y me encontré allí,
en el reflejo del espejo.
Solo, conmigo, cara a cara
con mi sombra nada más
proyectada en la pared.
Me miré a los ojos
y supe que te había mentido,
y al hacerlo también me mentí.
Esa es la verdad, ahora lo sé,
y seguirá siendo así
después de que apague la luz.
© 2024 Pablo Alejandro Pedraza
Buenos Aires, Argentina
Todos los derechos reservados